13 – 01 – 09

Si algo te remueve, quédate y experimenta todos esos sentimientos. Contempla la riquísima variedad y matices de las energías en tu conciencia, con sus tintes de negatividad, de dolor, de miedo, de vacío, etc. Vívelos! Quédate ahí y traspasa el umbral de tus limitaciones. Comprueba que no tienes límites. No huyas del miedo. El miedo no es nada. Quédate ante él y ve que no es nada! Eres la luz del mundo. No hay nada que temer. No tengas miedo a nada y si lo tienes, reconócelo y aún con él, haz lo que debes hacer, sin huidas. Sé un pilar de luz, que no olvida su propósito y que siempre está ahí, dispuesto a servir.