Ama a tu cuerpo en totalidad…
Mímalo…
Déjate ser amado y mimado…
Vuelve al mimo, vuelve al amor al cuerpo y expresado desde el cuerpo…
Siéntelo totalmente y trátalo con ternura…
Cuando venimos al mundo lo primero que nos encontramos son mimos…
Cuando hacemos mayores y vamos perdiéndolos, un enfado comienza…
Hay que consolar a ese niño…
Hay que mimar al niño que llevamos dentro…
Es algo que nos gusta realmente a todos…
Ser mimado es algo que todo el mundo está esperando…
Hay que deshacerse de vergüenzas…
No podemos avergonzarnos de poder abrazar, tocar, amar a otro ser humano…
No podemos tener resistencias a ser abrazados, tocados, amados…
El calor del contacto físico está lleno de un amor que gusta y también nutre…
Los niños que son dejados de tocar, crecen con un vacío…
Los niños que no son tocados, sencillamente mueren…
Todo el mundo merece ser mimado con ternura…
Y es un placer sublime y pleno el poder mimar, a uno mismo y al otro…
Es que si no, nos perdemos la vida…
Dar un abrazo es algo bueno, es algo natural, es algo hermoso…
El cuerpo es nuestro vehículo de comunicación aquí…
Utilicemos todas sus cualidades y facultades…
La mala interpretación de la espiritualidad no ha tratado bien al cuerpo…
Que no seamos el cuerpo no significa que haya que descuidarlo…
El cuerpo es algo neutro que está al servicio de la mente, a nuestro servicio…
Con la ternura de la comunicación corporal, la sublime luz lo va llenando todo…
